Esta es una receta vegana completa y nutritiva ya que la quinoa nos da la proteína vegetal más una base de hidratos de carbono que completamos con hortalizas. Estas, a su vez, nos dan también vitaminas y minerales, además de profundidad de sabor gracias al salteado y al aderezo con salsa de soja.
Ingredientes para 4 personas
- 300g de quinoa
- 2 zanahorias grandes
- 1 manojo de ajos tiernos
- 1 manojo de espárragos trigueros
- 1 bote de maíz tierno
- Salsa de soja
- Aceite de oliva
- Sal
Cómo hacer quinoa con wok de verduras salteadas
La quinoa es un alimento muy sano e interesante para completar una alimentación vegetariana ya que, como pseudocereal, contiene hidratos de carbono pero en menor cantidad que los cereales, y sin embargo contiene un interesante aporte de proteínas vegetales. Sin embargo, tiene poco sabor, por lo que siempre es ideal acompañarla con elaboraciones que se lo proporcionen, y por eso os proponemos esta receta vegana, que es una de las formas más sencillas de hacerlo.
Y empezaremos cociendo la quinoa. Lo primero es lavarla muy bien ya que, en la parte exterior del grano, contiene saponinas, que nos resultan amargantes al paladar humano. Así que la ponemos en un colador bajo el grifo y la lavamos con agua abundante, restregando incluso un poco. Hecho esto, la pasamos a una olla y la tostamos un poquito para darle algo de sabor. Luego agregamos agua y sal y la dejamos cocer entre 15 y 20 minutos (ver aquí como cocer quinoa). Una vez cocida, la escurrimos y la reservamos.

Pero durante los minutos de cocción de la quinoa, podemos empezar a preparar las hortalizas del salteado. Nosotros hemos elegido hortalizas con sabores que nos van a contrastar: el dulzor de zanahoria y maíz con el toque amargo del espárrago triguero, todo vertebrado a través de los matices del ajo tierno. Y empezaremos precisamente limpiando estos últimos: desechamos la capa superior, lavamos bien, cortamos las hojas superiores más abiertas y troceamos cada ajo tierno aprovechando al máximo el tallo del mismo, incluida la parte verde. Luego reservamos y pasamos a los espárragos, de los cuales desecharemos la parte inferior del tallo (la más dura) y lavaremos para trocear. Y por último, lavamos las zanahorias y las cortamos en dados, sin pelar para aprovechar al máximo sus nutrientes (ver aquí). Con las hortalizas listas, solo nos queda escurrir el maíz para que esté bien seco cuando vayamos a utilizarlo.
A partir de aquí, nosotros vamos a saltear las hortalizas en un wok, pero puedes usar una sartén. En todo caso, lo primero es verter aceite: en el caso de la sartén, sobre la base directamente; en el caso de wok, lo vertemos sobre las paredes para que vaya cayendo a medida que se calienta. Una vez el aceite esté bien caliente, salteamos en función de la dureza de las hortalizas: así que primero ponemos las zanahorias a fuego vivo. Una vez estén doradas, añadimos los espárragos, les damos unos minutos y agregamos los ajos tiernos. Salteamos sin salar, para que no se nos resequen, y cuando estén listas pero al dente, agregamos el maíz. Le damos unas vueltas y por último, en lugar de sal, añadimos un poco de salsa de soja sin bajar el fuego. Removemos bien y lo apagamos.
Si no quieres poner salsa de soja, cuando estén listas las hortalizas, simplemente apaga el fuego, sala y remueve. Con la salsa de soja no añadimos sal porque ya es muy salada de por sí. Luego solo queda mezclar la quinoa con las hortalizas, en el mismo wok o sartén para aprovechar bien todos los jugos, y ya tienes tu salteado listo para servir. Si lo quieres presentar como nosotros, en forma de rosco, sólo as de pasar la quinua con verduras salteadas a un molde, presionar un poco, poner un plato encima y luego girar para desmoldar.