Receta vegana muy completa en la combinamos los hidratos de carbono de las patatas con los de los guisantes secos, que además, como legumbre, nos dan un buen aporte de proteínas vegetales (ver aquí diferencias entre guisantes secos y tiernos), que se complementan con las de las setas, en este caso, portobello, que nos darán carnosidad y sabor.
Ingredientes
- 300g de guisantes secos
- 2 patatas grandes
- 4 alcachofas
- 1 bandeja de setas portobello
- 1 puerro
- 1 copa de vino blanco seco
- Caldo de verduras (ver aquí cómo hacerlo)
- Jugo de limón
- Aceite de oliva
- Sal
Cómo hacer guiso de guisantes secos con patatas y portobello

Este es un guiso muy sabroso que puedes comer meloso, como en la foto superior, o puedes hacerlo más caldoso, por eso en la lista de ingredientes no te hemos indicado la cantidad de caldo de verdura a usar. Pero en todo caso, como partimos de los guisantes secos, lo primero que vamos a hacer es rehidratarlos dejándolos en remojo entre 4 y 8 horas antes de su cocción. La diferencia de tiempos radica en si son partidos o no, y en el tiempo que hace que se recolectó la legumbre (a más tiempo, más necesidad de remojo previo). A partir de aquí, vamos a hacer un guiso al uso, en el que integramos la cocción de los guisantes. Así que empezaremos con un sencillo sofrito.
Para ello, vamos a preparar las hortalizas. Primero lavamos puerro. Luego lo cortamos por la mitad longitudinalmente y lo troceamos en juliana. Desechamos las hojas exteriores de las alcachofas y nos quedamos solo con el corazón. Cortamos cada uno por la mitad, eliminamos los pelillos interiores y los troceamos en gajos. Luego los rociamos con un poco de jugo de limón para que no se oxiden y las reservamos. Lavamos y pelamos las patatas, y las cortamos chascándolas, es decir, introduciendo el cuchillo para acabar de romper el pedazo haciendo palanca con él. Así nos dejarán el almidón en el guiso pero no se nos romperán durante la cocción. Y por último limpiamos las setas portobello (ver aquí Diez setas para enriquecer tus recetas vegetarianas y veganas) con un cuchillo y un trapo para eliminar posibles restos de tierra, pero evitamos el agua para que no pierdan textura ni sabor. Y ya podemos empezar a cocinar.

Ponemos una olla al fuego con un buen chorro de aceite y lo primero que vamos a hacer es saltear los portobello enteros. Una vez bien salteados, los retiramos de la olla, los salamos y los reservamos. En la misma olla, con el mismo aceite, ponemos a pochar el puerro con una pizca de sal, tapado y a fuego lento para que sude.
Cuando el puerro quede bien tierno, agregamos las patatas y las alcachofas y las rehogamos a fuego vivo durante un par de minutos. Añadimos el vino y rehogamos todo junto un par de minutos más. Por último, incorporamos los guisantes, removemos, cubrimos con el caldo (añade más cantidad si prefieres un guiso caldoso) y, un vez arranque el hervor, bajamos el fuego y dejamos cocer hasta que los guisantes queden tiernos, lo cual nos llevará alrededor de unos tres cuartos de hora.