En octubre llegan las alcachofas más tempranas y las más tardías en mayo. Una ración de alcachofas incluye más de un tercio de nuestras necesidades diarias de fibra. Esta, añadida a las propiedades diuréticas de la alcachofa, facilita que el sistema digestivo haga su trabajo y tiene propiedades antiinflmatorias. La alcachofa también tiene propiedades depurativas y regula la secreción biliar, por lo que está indicada en casos de mala digestión de las grasas, ictericia e hígado perezoso
