Receta de salsa velouté, una salsa a base de caldo de verduras que se texturiza para que quede cremoso y que nos permite muchísimas variaciones al ser una salsa madre. ¿Quieres descubrir cómo?
Ingredientes
- 500ml de caldo de verduras casero
- 30g de harina
- 30g de margarina
- Sal
Cómo hacer velouté vegana
La velouté es una salsa parecida en su proceso a la salsa bechamel (ver aquí receta de bechamel vegana), pero con caldo en lugar de leche vegetal. Con las salsa velouté, lo que básicamente hacemos es texturizar el caldo para que nos quede cremoso. Y para ello empleamos una técnica muy habitual en cocina, la roux, que consiste en mezclar un elemento graso (en este caso margarina vegetal) con harina para que luego el conjunto sirva de espesante. Veamos cómo.
Primero ponemos el caldo a calentar, porque lo necesitamos caliente para hacer la salsa. Luego, aparte, ponemos a derretir la margina en un cazo. Cuando esté derretida, añadimos la harina. Para hacer una roux, lo habitual es que haya la misma cantidad de elemento graso que de harina. A partir de aquí, la rehogamos un par de minutos, removiendo constantemente a fuego medio. Para hacer una salsa velouté, no nos interesa que se tueste demasiado, así que pasados los dos o tres minutos, la retiramos del fuego y la dejamos atemperar un poco, porque facilitará luego la mezcla.
Ahora, fuera del fuego, vertemos el caldo calentito progresivamente, a la vez que vamos mezclando para que se disuelva la roux en el caldo. Cuando esté todo el caldo vertido, removemos un poco más hasta que la mezcla quede sin grumos. Y vuelta al fuego.
Ponemos el cazo a fuego bajo y dejamos cocer un cuarto de hora sin dejar de remover, para que así se cueza la harina y vaya cambiando la textura hasta hacerse más cremosa.
Como tunear la salsa velouté vegana
Como salsa madre, la salsa velouté nos permite hacer muchas variaciones añadiendo aromatizantes una vez la tenemos lista. Como veis por la foto superior, nosotros hemos añadido perejil, pero puedes emplear las hierbas aromáticas que desees, e incluso infusionar el caldo con alguna de las más duras, como romero o tomillo (ver aquí usos de 12 hierbas aromáticas). A a su vez, también puedes emplear especias según el plato que desees acompañar, como cúrcuma, cardamomo para darle un toque cítrico y fresco, etc. (ver aquí usos de 12 especias)
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